Alguien que sea espiritual, tiene una comprensión del mundo, diferente de la que tienen otras personas. No se es mejor ni peor persona. Se trata de la comprensión de que tenemos un cuerpo y un alma, y debemos cuidar los dos. Es mucho más sencillo que lo que cuentan esos charlatanes que sueltan parrafadas insufribles que parecen no llevar a ningún sitio. Sé de qué hablo, he leído cientos de libros y hecho montones de cursos para evolucionar de una manera consciente. Y esto hace que captes enseguida quien es sincero y a los que son unos mentirosos compulsivos, que se rodean de un halo de misterio.
Yo soy espiritual, no es un camino a elegir, fue dictado por mi corazón y mi alma. Te das cuenta que hay algo más y quieres profundizar en ello. Además, trabajo en sanidad, aunque soy personal no sanitario, comprendo bien los sufrimientos y luchas diarias a que se enfrentan las personas enfermas, que bastante tienen para ellas. Lee bien el título y hazlo. Si alguien te dice que dejes tu tratamiento, huye. Así de claro, una persona espiritual que entiende del alma, jamás te pediría eso, nunca. Como mucho, te daría una serie de nociones para implementar, conjuntamente con tu tratamiento. Por ejemplo, intentar estar positivo, ver sólo cosas alegres en la televisión, lecturas amigables y quizá visualizarte sano y cosas así, sencillas y factibles, sin dejar de evolucionar al lado del médico.
Si hay gente que pueden con el pensamiento y la visualización curarse de repente o que surja algún "milagro", curaciones no entendidas por el personal sanitario, pero créeme, esa persona está al nivel "Jesús" como poco, o ha recibido su ayuda.
Y porque soy espiritual me creía en la necesidad, de explicar mi punto de vista, porque estos días en la televisión española se está hablando de "falsos curanderos", no saben muy bien de lo que hablan porque son periodistas haciendo una investigación fuera de sus límites de comprensión, a mí me pasaría igual. Pero están en lo cierto en lo que dicen, nadie que sane con energías, regresiones, bioneuro... lo que sea, debe pedirte que abandones un tratamiento. Lo repetiré las veces necesarias. Sé inteligente.
Sé feliz, que al final, es lo que importa.
Permíteme aquí aconsejarte un libro, que es muy bonito y ameno, y te abre la puerta a otros conocimientos.
Yolanda Del ©