Ante una decisi贸n complicada, la mayor铆a de la gente escoge quedarse en zona conocida. Esa zona que nos da una falsa sensaci贸n de seguridad y beneficios. ¿Para qu茅 vamos a movernos de d贸nde estamos si eso es lo que los dem谩s esperan de nosotros? Lo mejor es continuar en el mismo sitio haciendo las mismas cosas, yo tambi茅n lo he comprobado durante muchos a帽os. El trabajo que te corresponde, las amistades de siempre, los mismos edificios, los mismos sentimientos.
Pero la zona de confort en realidad es el matadero de los sue帽os. Ah铆 nos van despiezando poquito a poco y moldeando al gusto de los dem谩s, de la familia, de la pareja, del trabajo. Y vamos tomando la forma de alguien que es dif铆cil reconocer en el espejo cuando nos observamos. Entonces salimos a la calle con esa falsa sensaci贸n de seguridad, que nos hace parecer fuertes y decididos. Y nos disponemos a cruzar el mundo... hasta el bar o el cine de siempre.
Lo sue帽os son peque帽as piezas de personalidad que van dejando de existir y en su lugar, se va nublando aquella idea, aquella antigua visi贸n que nos daba felicidad.
Pero ¡ay! ¡qu茅 a gusto se est谩! Los padres se sienten orgullosos, tu novio te apapacha, los d铆as transcurren sin la necesidad de pasarlo mal o enfrentar la vida. Llega el verano y preparamos ese viaje de ensue帽o. La suegra nos prepara tappers. Se planea tener hijos que rellenen esa vida perfecta. Y poco a poco nos conformamos, porque no hemos creado ning煤n maremoto en la gente de alrededor. Esas personas que "queremos y nos quieren". (El maremoto se va interiorizando).
Los a帽os pasan y empezamos a pensar si no debimos escribir el libro, fugarnos con el amor de nuestra vida, escuchar otro tipo de m煤sica, vivir en otra ciudad u otro pa铆s.
No todo est谩 bien visto. No porque nuestras circunstancias no est茅n bien, sino porque cada uno tiene su forma de ver la vida, y no se va a adecuar a la nuestra. Lo que sucede, es que cuando intentas hacer las cosas "fuera de lo normal" enseguida va a salir la voz de la conciencia, una voz cercana y reconocible, de la que nos fiamos, dici茅ndonos que por ah铆 no vamos bien, o qu茅 dir谩 fulanita, o ahora c贸mo se lo explico a tu t铆a ¿Y con qui茅n vas a estar mejor que con tu novio de siempre?
Por el contrario, lo que se va a reforzar al salir de esa zona, es la autoconfianza. Nunca te sentir谩s mejor, aunque el camino conlleve uno o varios duelos. Nunca ser谩s m谩s fuerte y tendr谩s mejor visi贸n de la vida. Se pueden usar peque帽as acciones frente a grandes cambios, mini estrategias frente a ese temor a desilusionar a otros. Esta zona puede ser f铆sica y mental. No es moverse de lugar, es permitirnos a nosotros mismos sentir como en realidad somos, permitir que nuestro "yo real" que est谩 encerrado en nuestro interior salga al exterior. Darnos alas a nosotros mismos. Podemos ponernos l铆mites para que no nos asfixien los miedos y las dudas, pero "sin limitarnos", aunque suene raro.
Con una visi贸n y poco a poco, sin prisa, pero accionando, se puede salir de esa zona que es una trampa que nos encarcela.
Es decisi贸n propia. Nadie va a sacarte las casta帽as del fuego, pero puedes tener apoyos de profesionales. Al final lo que queda, es ser uno mismo, y tener una vida plena, en base a lo que nuestra visi贸n nos diga que eso es para nosotros la vida perfecta. Y no va a ser lo mismo que para otros. Los padres se acaban yendo, es ley de vida. Los hermanos hacen su propia familia. Los amigos buscan sus propios caminos. Si te quedas varado por el qu茅 dir谩n, d茅jame decirte que en realidad les importa una mierda. Todos ellos tienen su propia historia, y van a seguir con ella. Ni por un momento creas que te van a aplaudir por estar en "la zona", y cuando hayan logrado que permanezcas, se ir谩n a su casa y cerraran la puerta. Pero no te preocupes, siempre podr谩s ir a comer a su casa los domingos.
Yolanda Del ©